Presentan diagnóstico de las y los adolescentes que cometen delitos graves en México

El vacío por la falta de una legislación federal en materia de justicia para adolescentes, provocó que los estados regularan las penas en delitos graves, que van de un año hasta más de 20, en los casos más extremos como Aguascalientes cuya pena máxima es de 21 años de prisión.

Es por esto que expertos reunidos en la Secretaría de Gobernación, presentaron un diagnóstico de las y los adolescentes que cometen delitos graves en México y urgieron que la nueva Ley Nacional en la materia que se discute en el Senado, parta de una visión preventiva, cuyo eje sean los derechos humanos y el interés superior del menor.

“El Sistema Penal como todo mundo lo sabemos, es un mal, no es un bien para los niños… El encierro no va a tener ningún efecto positivo de tal manera que hay que establecer mecanismos precisamente para hacer como quiere la Constitución al encierro un último recurso”, Dr. Rubén Vasconcelos Méndez, Dir. Asesoría Jurídica Federal Comisión Atención a Víctimas.

La nueva legislación debe ir acompañada de un cambio institucional en la justicia para adolescentes.

“La principal garantía de los sistemas de justicia juvenil es la especialización de sus operadores. Se puede tener la mejor ley pero operadores no capacitados y el sistema no va a funcionar”.

El diagnóstico presenta la situación del 78% de adolescentes en reclusión en 4 estados, de los cuales un gran porcentaje se determinó con muerte social, pues dijeron no tener sueños.

“50% están aburridos, 49% tristes, 42% desanimados, 40% solos, 35 desesperados y 25 enojados… Solo 27% piensa que va a salir bien”, Dra. Elena Azaola Garrido, Investigadora CIESAS y Coordinadora Diagnóstico.

Los delitos en los que más reflejaron sentir culpa son secuestro y homicidio. En México cada año son privados de la libertad en promedio 4 mil 500 adolescentes acusados por delitos graves. En 2014 hubo un total de 16 mil 885 internos, el 27% por delitos graves, del total de adolescentes 93% fueron hombres.

Hoy es la celebración del día de los Derechos Humanos, y debemos seguir velando porque sean respetados.

DD1B96E6-23B9-4632-A115-7EB37223C0FC8EA7862B-DA85-430E-8C7C-AD66B1969C13

El Día de los Derechos Humanos se celebra el 10 de diciembre, se conmemora el día en que, en 1948, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
En 1950, la Asamblea adoptó la resolución 423 (V), invitando a todo los Estados y organizaciones interesadas a que observen el 10 de diciembre de cada año como Día de los Derechos Humanos.

En esta ocasión el Día está dedicado al lanzamiento de una campaña de un año de duración para conmemorar el 50 aniversario de los dos pactos internacionales de derechos humanos: el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, que fueron adoptados por la Asamblea General el 16 de diciembre 1966.

• Los dos Pactos son jurídicamente vinculantes para los Estados que son parte.

• En la actualidad 168 Estados son parte del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.

• 164 Estados son parte hoy en día del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales.

• Los dos Pactos fueron adoptados por la Asamblea General el 16 de diciembre de 1966 y entraron en vigor en 1976, después de obtener las ratificaciones de un número suficiente de países.

• Cada uno de los Pactos es supervisado por un comité de expertos, que revisan el progreso de los Estados parte. El comité también escucha demandas individuales y evalúa si los Estados deben remediar alguna situación.

• Junto con la Declaración Universal de los Derechos Humanos, los dos Pactos constituyen la Carta Internacional de Derechos Humanos, que establece los derechos que son patrimonio de todos los seres humanos.

Necesario construir un modelo integral de prevención de violencia escolar en Tijuana

Las manifestaciones de violencia que con mayor frecuencia se presenta entre los jóvenes fue a través de las redes sociales o llamada violencia cibernética con el 90%, seguida por la violencia emocional, sexual y física.

TIJUANA B.C. Especialistas de la Sociedad de Ciencias Forenses en Baja California en coordinación con el Instituto Regional de Investigaciones sobre Prevención y Participación Ciudadana en Baja California A.C. coinciden en afirmar que los incrementos de la violencia escolar en planteles de Tijuana se ha venido manifestando de manera alarmante y esto motiva  construir un modelo de intervención para contener y prevenir dicha violencia.
La Psic. Liliana Morales coordinadora  de la Sociedad de Ciencias Forenses en Baja California  señalo que luego de una investigación realizada a partir del 2014 a través del Programa  Nacional para la Prevención del Delito 2014 en escuelas secundarias de la Col. El Pípila en la ciudad de Tijuana, se logro detectar algunas conductas de violencia escolar entre los estudiantes de secundaria y con ello proponer el desarrollo de un modelo de integración y estrategias cognitivas, conductuales, emocionales para disminuir y combatir dichas conductas.
En septiembre del 2010, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), informó que el 40% de la población escolar de primaria y secundaria en nuestro país fue víctima del fenómeno de violencia llamado bullying.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México ocupa el primer lugar internacional de casos de bullying en educación básica ya que afecta a 18 millones 781 mil 875 alumnos de primaria y secundaria tanto públicas como privadas, “esto nos habla de que la violencia en las escuelas  está en aumento y el fenómeno se encuentra entre nuestros niños y jóvenes” refirió la psicóloga de la Socifo en Baja California. 
 Afirmo que la violencia en los planteles educativos no son hechos aislados  y están afectando directamente a niños y adolescentes por lo que se deben diseñar estrategias integrales como las planteadas en el modelo para detener este fenómeno negativo. 
Durante le explicación realizada en la Sala de Capacitación de la Sociedad de Ciencias Forenses en Baja California, acompañada de Cristina Padilla, Criminologa y coordinadora del Instituto Regional de Investigaciones sobre Prevención y Participación Ciudadana en Baja California así como Karla Rivera colaboradora de ambos organismos, señalaron que  de 300 estudiantes evaluados en tres  áreas de 36 ítems, se logra  identificar el  tipo de rol que con mayor frecuencia los estudiantes se clasifican, testigo u observador, agresor o víctima. 
En la etapa numero dos se identifica el tipo de violencia entre los estudiantes, físico, emocional (psicológico), sexual o cibernético. Sin embargo, en esta etapa de la evaluación se logra identificar entre quien se da el acoso o violencia escolar,  maestro – alumno, alumno-maestro o alumno-alumno, refirió Cristina Padilla, coordinadora de IRIS Prevención BC.  
La tercera etapa que se evalúa es la capacidad de resiliencia que tienen los alumnos para sobrellevar situaciones de adversidad, así como la capacidad de desarrollo de habilidades y hábitos que tienen los jóvenes. 
De acuerdo al análisis y los resultados de la evaluación se logra determinar que la violencia esta presente entre los adolescentes de las escuelas secundarias, 33% ha sido víctima de alguna manifestación de violencia dentro de los planteles educativos, 22% la ha ejercido de alguna forma y por lo menos el 37% la ha visualizado.  
Afirman las representantes de ambas organizaciones que en cuanto a las manifestaciones de violencia que con mayor  frecuencia se presenta entre los jóvenes fue a través de las redes sociales o llamada violencia cibernética con el 90%, seguida por la violencia emocional, sexual y física. Situación que orilla a los jóvenes a pasar por un proceso depresivo el cual debe prevenirse a tiempo y fortalecer la comunicación padre e hijo.
Respecto a la situación sobre cómo afrontan los jóvenes las situaciones adversas a través de la resiliencia, los alumnos mostraron un 65% para desarrollar esta habilidad y 55% mostró poco o nula aptitud. 
Asimismo, el estudio señalo que uno de los grandes problemas que presentan tanto víctimas como abusadores, son las dificultades de relación con su entorno y las pocas habilidades sociales que permitan encontrar soluciones asertivas a las situaciones. Por ello, el modelo desarrollado conlleva a la integración de estos aspectos y sin que sea limitativo a la identificación de la violencia sino que ademas fortalezca los factores de protección a través de una articulación escuela, hogar.